Hasta hace relativamente poco tiempo muchos profesionales no podían imaginarse, ni si quiera soñar, el ahorro de tiempo que conseguirían utilizando una maquina tan común hoy día como es el ordenador personal.
Profesionales como arquitectos, diseñadores, periodistas, investigadores, ingenieros, fotógrafos..., han visto como su forma de trabajar ha cambiado radicalmente. No estoy hablando solo de internet, si no de programas que se han creado para facilitar el trabajo e incrementar el rendimiento de estos profesionales. Programas como el autocad (para arquitectos), photoshop (para fotógrafos), quark (para periodistas), free hand (para diseñadores), sibelius (para componer música) o incluso el desarrollo de bases de datos para investigadores, no solo han ayudado a desarrollar hasta cotas inimaginables el trabajo de estos profesionales, si no que han acercado el mundo de la arquitectura, de la fotografía, del diseño.... a un público mas general.
Sibelius (programa para editar partituras)
Pero no solo ha habido un desarrollo en la programación, sino también en los accesorios para ordenadores, como bolígrafos digitales (para pasar directamente apuntes a ordenador), micrófonos (con programas de reconocimiento de voz se puede pasar un texto leído al ordenador), cámaras, tabletas de diseño (gracias a este accesorio los diseñadores y dibujantes pueden dibujar como si lo hiciesen sobre papel), pizarras digitales (los profesores pueden dar la clase de manera mas interactiva).
La conclusión que intento señalar es que estos programas han facilitado mucho el trabajo y la forma de entenderlo. Hace 15 años esto era inimaginable, dentro de 15 años todo habrá cambiado drásticamente.
Andrés Hurtado Juárez 1ºA Nº16
Las nuevas herramientas de trabajo, basadas en la tecnología digital, facilitan la elaboración de los trabajos y también, la introducción de correcciones, rectificaciones, ampliaciones... antes de su presentación final.
ResponderEliminarEsto lleva a una mayor limpieza del trabajo presentado y posibilita la revisión del mismo sin tener que rehacer de nuevo parte del contenido que, tras las necesarias revisiones de todo trabajo, puede ser necesario.
Por ejemplo, con el photoshop, una fotografía que no haya salido a tu gusto, admite retoques y posibilita otros efectos. Otro ejemplo, antes de la existencia de autocad, las modificaciones para un arquitecto, suponían la indeseable labor de raspar el papel vegetal dibujado con tiralíneas cargados de tinta china (u otras herramientas más actuales como los rotrings), mientras que ahora en la pantalla llevas a cabo esa labor sustituyendo una forma de trabajo física por una digital.
Carolina Escobar Martín, nº 7, 1ºA.